Se ha dicho que «la iglesia no es un museo de santos, sino un hospital para pecadores». Todos estamos quebrantados y heridos de una forma u otra. Desafortunadamente, muy a menudo tenemos la necesidad de esconder el dolor y ponernos una máscara, de esconder las lágrimas y mostrar que vivimos una «vida victoriosa».
Lagrimas Valientes
₡10,900.00
Esperanza viva en un mundo pasajero
Disponibilidad: 1 disponibles
- Envíos Garantizados (3-6 días)