Los cristianos son cada vez más vistos como anticuados, restrictivos y prejuiciosos cuando se trata de sexo antes del matrimonio, la cohabitación, la homosexualidad, la identidad de género o los derechos de los transexuales. De hecho, para muchas personas, este tema es una de las mayores barreras para considerar el cristianismo.
Sam Allberry, autor de muchos libros, entre ellos Is God Anti-Gay?, expone el buen diseño de Dios para la expresión de la sexualidad humana, mostrando que Dios mismo es amor y que solo él puede satisfacer nuestros deseos más profundos.